Cuándo debo escribir
para que no tenga que olvidar.
Imaginar,
pensarla junto a mi
desperdigándose,
mezclándose
si se pone a llorar.
Empiezo por la pequeña luna de luz espesa perdida en la noción del tiempo. Quiero despertar. Muriendo en un adiós y recordando un te quiero en el arribo de las últimas hebras de la gran luna azul.
Olvido se llama y me alegraré de no ser yo y ser ella sin un adiós que sobreviva un tiempo.